La nevera, un armario más

foto: @juanllorca

Cuando en los cursos me preguntan cúal es el orden óptimo de la nevera, yo siempre respondo que debemos tratarlo como un armario más. De la misma forma que tenemos el vestidor organizado por tipos de ropa y la despensa por tipos de comida, la nevera pide también su organización. Es decir, que cada cosa debe tener su lugar dentro de este armario electrodoméstico.

Como cada uno tiene ingredientes diferentes en su nevera, diferentes hábitos, y lo que comemos y metemos en la nevera varía durante el año, no debemos buscar ubicaciones fijas para los alimentos, creo, sino unas pautas lógicas que nos sirvan a todxs.

Yo recomiendo lo siguiente:

  1. Visualiza qué quieres de tu nevera. ¿Que te ayude a decidir la cena más rápido, que te facilite ser constante con una dieta más saludable? Lo que sea, pero que sea tu deseo.

  2. Quita todo lo que sinceramente sabes que no vas a comer. Te lo compraste con muy buenas intenciones, pero allí se ha quedado y se echará a perder si no lo das a alguien que lo aproveche.

  3. Separa tu nevera en zonas. Puedes dividirla por tipos de comida, como por ejemplo verduras frescas en una balda, y táperes con comida cocinada en otra. Cada producto tendrá su lugar y sabrás dónde encontrarlo sin rebuscar.

  4. Mira tu nueva nevera organizada y piensa si tal como está te va ayudar a cumplir tu deseo.

  5. Mantén en el día a día el orden escogido y frena la entrada del exceso a la nevera para no atiborrarla.

Añado cinco otros truquetes:

  • Los botes de cristal ocupan menos superficie horizontal en la nevera (y en el armario) que los táperes y ves el contenido más fácilmente. 

  • Aprovecha el espacio vertical poniendo derecho en vez de estirado alguna comida, como la pasta fresca.

  • Mete los productos a la nevera sin su embalaje, como los yogures, los huevos y la cerveza.

  • Ayúdate de bandejitas para agrupar la comida, como ingredientes para las ensaladas, la pizza o los embutidos.

  • Pregúntate si todas las verduras y frutas necesitan estar en la nevera cuando no es verano.

Mi conclusión siempre es la simplificación. Mi pequeña nevera ahora es espaciosa porque ya no tengo alimentos procesados, artificiales ni ingredientes que no vayan con mi filosofía de vida. Espero que tu nevera esté a tu servicio para simplificarte el día a día y ayudarte a conseguir tus propósitos de salud y placer más deseados.

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