Papeleo ordenado como Marie Kondo
Marie Kondo nos facilita la vida una vez más al proponernos cómo debemos ordenar el papeleo. Me encanta la simplicidad de esta clasificación y siempre la recomiendo porque evita el desmadre de documentos y te reconecta con tus intereses y prioridades. ¡Todo ventajas, vaya!
Clasificaremos los papeles en tres únicas categorías, que son las siguientes:
Primera categoría: papeles urgentes que debes gestionar ya mismo, como multas a pagar, facturas que reclamar o el tíquet de unos zapatos que vas a devolver.
Segunda categoría: documentos importantes que debes conservar en papel, como las escrituras de la casa, contrato de alquiler, historial médico (si no lo tenemos ya online o escaneado), contrato del seguro, garantías de electrodomésticos, declaración de la renta, etc. En caso de duda, pregunta a un gestor qué documentos debes guardar en papel, qué documentos puedes escanear (haciendo una foto con el móvil es suficiente o con una app) y cuáles puedes tirar alegremente.
Tercera categoría: papeles que estás usando ahora mismo, como el libro y la libreta del curso de inglés o el libro de la autoescuela hasta que tengas el carnet.
Vamos a descartar pues, por ejemplo, las instrucciones de la tostadora en múltiples idiomas. Si un día te olvidas de cómo funciona, puedes encontrar los manuales por internet. También las garantías caducadas, recibos de la luz pagados, apuntes de cursos que no volverás a necesitar, papelotes de aficiones pasadas que quieres retomar “algún día” (y este día nunca llega) y trabajos antiguos que guardas “por si acaso”.
Cuando te encuentres con revistas, resístete a la tentación de repasar los recortes por que te van a dar las tantas. Mi consejo es que ni te los mires si no los estás usando ahora y los sueltes con agradecimiento por lo que disfrutaste en su día mirando las revistas.
¿Qué hago con cartas, postales y felicitaciones que encuentre entre el papeleo?
Si no tienes claro que quieres tirarlas, mi consejo es que las apartes. Los papeles con valor sentimental forman parte de la categoría de recuerdos, que es lo ultimísimo de la casa que vas a ordenar ya suele ser lo más difícil por razones emocionales.
Cuando acabes el proceso de descarte y orden de los papeles, experimentarás un alivio muy gustoso. Los documentos que hayas decidido conservar te reforzarán en tu momento presente y te facilitarán el camino hacia la persona que quieres llegar a ser.
¡Feliz orden!
Si tienes preguntas me las puedes escribir en los comentarios y estaré encantada de contestarte.