El trastero, esa jungla inexorable
Los trasteros son una solución de espacio espectacular para pisos pequeños o grandes familias. Nos permiten liberar la casa de enseres que no usamos en el día a día sin tener que renunciar a ellos. Son perfectos para guardar repuestos, herramientas o aficiones voluminosas, como los deportes acuáticos o de montaña.
Sin embargo, la otra cara de este espacio maravilloso es que se puede descontrolar y acabar siendo un agujero negro donde el caos absorbe lo que entra y de allí no sale nunca más. Ordenar el trastero es una tarea pendiente que nos atormenta y nos da da pereza por igual. Guardamos muebles o cuadros que no pegan o no caben en nuestra casa actual, pensando que los aprovecharemos algún día (si nos mudamos a otra casa, supongo :). Tenemos trastos a la espera de ser usados que van cogiendo polvo y afeando nuestro trastero, y cajas olvidadas y misteriosas que no se han abierto en años.
¿Por dónde empiezo?
- Para ordenar tu trastero, ya sabes lo que te voy a recomendar: haz un despeje exhaustivo. Sácalo todo y elige con qué te quedas.
- Si te abruma la cantidad, empieza en el sentido de las agujas del reloj y sigue este orden, “escaneando” lo que encuentres a tu paso.
- Agrupa las cosa por tipo o categoría, y cuando esté todo clasificado, asigna sitios. No antes.
- Si te atascas, separa lo que es fácil de tirar (por ejemplo, lámpara estropeada) de lo que tiene valor sentimental, que ya revisarás al final de todo.
- Si le estás guardando cosas a un amigo o familiar y quieres que se lo lleve, mándale una foto por whatsapp y acuerda una día de recogida. ¡No subestimes el poder de marcar una fecha límite! :)
¿Cómo lo ordeno?
Es vital que cada cosa tenga su sitio, para que todo quede bien guardado, y no amontonado como si fuera un vertedero.
- Recomiendo usar cajas resistentes de plástico transparente, todas iguales, para conseguir homogeneidad.
- Además, cada miembro de la familia tendrá su caja o espacio asignado, así cada uno sabe cuánto espacio está ocupando y encuentra rápidamente sus cosas, que están juntas.
- Otra buena idea es aprovechar el espacio vertical con unos estantes fuertes y sólidos y evitar, cueste lo que cueste, dejarlo en el suelo.
- Lo pesado irá colocado más abajo y lo más ligero irá más arriba.
¿Cómo lo mantengo así de prístino y precioso?
- Antes de meter algo nuevo en el trastero, pregúntate si es útil para ti o tu familia en este momento.
- Antes de guardar trastos por inercia, recuerda cuánto te ha costado ordenar el trastero y proponte no recaer en el caos.
- Luego, colócalo en su sitio, y no cedas a la tentación de dejarlo “por ahí”.
- Mantén el trastero limpio y ventilado.
Finalmente, puedes añadir algún toque de decoración que personalice tu trastero. Estos espacios no tienen porqué ser fríos e impersonales. Es más, en mi opinión, no deberían serlo, a fin de cuentas pueden considerarse como otra parte de la casa más, que está “trabajando” para albergar tus cosas y las de tu familia.